jueves, 31 de octubre de 2013

ANECDOTARIO DE LA DEGENERADA VIOLENCIA "DE GENERO". La dominicana despechada

EL CASO DE LA DOMINICANA DESPECHADA
(extraido del libro El Varon Castrado, de Diaz Herrera)

La dominicana Elena, 32 años, llegó a España en 1994. Tras largos años de trabajo en el servicio doméstico, cuando creyó que tenía suficiente dinero para alquilar una casa, envió cierta cantidad a la República Dominicana para que vinieran su marido y sus hijos, de los que lleva separados seis años.

Pero su marido, Juan, 39 años, se gastó el dinero en prostitutas y alcohol y tuvo que quedarse en su país.

Al enterarse de lo ocurrido, su mujer lo perdonó. Acto seguido le envió un billete de avión para que pudiera volar por Dominicana de Aviación.

DENUNCIA EN FALSO A SU MARIDO PARA TENER VIA LIBRE Y LIARSE CON SU AMANTE

180361pceoind431895[1].jpgMUJER ARRESTADA POR INVENTARSE UNA DENUNCIA FALSA DE VIOLENCIA DE GENERO PARA QUE EXPULSEN A SU MARIDO DE LA CASA PARA INICIAR UNA NUEVA RELACION CON OTRO HOMBRE

Arrestada una mujer en Antequera (Málaga) por denuncia falsa de maltrato Una mujer de 44 años de edad ha sido arrestada en Antequera acusada de un delito de denuncia falsa después de que acusase a su esposo de malos tratos para que fuese detenido y poder iniciar otra relación con otro hombre.

Un ejemplo de denuncia falsa que termina en archivo provisional

No sólo son denuncias falsas aquellas en las que se insta y resuelve simulación de delito, como pretenden los autodenominados "expertos" -modestos ellos-, como el desnortado de Miguel Lorente, o la Cueto que dirige el juzgado feminazi 1 de Granada. También en su inmensísima mayoría las denuncias que terminan en sobreseimiento. He aquí un buen ejemplo de cómo las denuncias falsas falsísimas terminan siendo sobreseídas y archivadas.

T R I B U N A L  S U P R E M O
Sala de lo Penal
AUTO
CAUSA ESPECIAL
Causa Especial Nº: 20663/2012
Fallo/Acuerdo: Auto Desestimando

Procedencia: Juzgado de Violencia Sobre la Mujer nº 2 Las Palmas de Gran Canaria.

Las ventajas de la denuncia falsa de maltrato

La motivación de la denuncia falsa ante los inquisitoriales Juzgados feminazis de genero (aunque en realidad la Inquisición ofrecía infinitas más garantías que esos engendros judiciales plagados de tiorras feminazistas radicales de género), no sólo responde a obtener ventajas en los procesos de separación o divorcio; también es la llave a robarle al hombre todas y cada una de sus pertenencias.

He aquí lo que advierte Diaz Herrera, autor de El Varon Castrado.

90% de absoluciones, pese a la implacable maquinaria inquisitorial feminazi

Acerca del Varon Castrado /2

JOSÉ DÍAZ HERRERA, PERIODISTA Y ESCRITOR
«Muchos de los juzgados de violencia de género están en manos de feministas»

Periodista Digital
Por Miguel Pato
Jueves, 28 de diciembre 2006

La Constitución, en su artículo 14, asegura que los españoles son iguales ante la ley sin discriminación por razones de sexo. Mentira. Al menos, eso aseguran las asociaciones de padres separados e importantes figuras de la Justicia. La culpable es la Ley de Violenica de Género. Periodista Digital habla de las lagunas y peligros de esta ley con José Díaz Herrera, autor del libro El varón castrado.

Detenciones arbitrarias masivas de hombres. Maria Sanahuja

sanajuana[1].jpgLa juez decana de Barcelona, María Sanahuja, denuncia «miles» de detenciones masivas «sin apenas indicios» por malos tratos,

Carol Álvarez en El Mundo
«Hemos causado un gran dolor a un montón de hombres»

« No hay delito que lleve a la detención masiva de miles de hombres, sin apenas indicios», denuncia la juez decana de Barcelona, María Sanahuja, pero la aplicación de la Ley Integral de Violencia de Género lleva a hacer real esta situación, «propia de regímenes totalitarios», advierte la decana. Fue ése el pensamiento de Sanahuja cuando concluyó, ayer, que «la Justicia española aún ha de hacer la transición democrática».

Masacre judicial contra el hombre. Datos de Diaz Herrera

ACERCA DEL VARON CASTRADO / 1

PRESENTACIÓN DEL LIBRO "EL VARÓN CASTRADO", DE JOSÉ DÍAZ HERRERA, EDIT. PLANETA, VERDADES Y MENTIRAS SOBRE VIOLENCIA DOMÉSTICA EN ESPAÑA.

Nacido en Santa Cruz de Tenerife hace 56 años, José Díaz Herrera es un licenciado en Ciencias de la Información especializado en el periodismo de investigación. Con Isabel Durán ha escrito numerosos ensayos y en 2005 publicó en solitario Los mitos del nacionalismo vasco, un texto que hace un amplio uso de novedosas fuentes documentales públicas y privadas.

Quizá el hecho de estar separado y tener dos hijos en custodia compartida esté entre los motivos que le han llevado a escribir El varón castrado. Verdades y mentiras de la violencia en España, un texto que tiene, como los cortes geológicos de terrenos sedimentarios, distintas capas superpuestas. Lo primero que ve el lector es una feroz crítica de la Ley Integral contra la Violencia de Género. Tal como señala el autor, 2006 ha sido el primer año natural en el que la Ley contra la Violencia de Género ha estado vigente. Dicha ley fue la primera de las grandes leyes impulsadas por Zapatero para modificar la estructura emocional y de valores del país.

La plena aplicación de la Ley contra la Violencia de Género ha supuesto en España, como señala Díaz Herrera, un despliegue de medios gigantescos. Más allá de jueces y policías, ha sido necesario el apoyo de numerosos profesionales cuya remuneración le ha supuesto al contribuyente mucho dinero. Por desgracia, esta utilización de recursos no ha impedido que 68 mujeres hayan sido asesinadas por sus parejas. Ocho muertas más que en 2005 pese a que 80 hombres han sido condenados diariamente. Entre julio de 2005 y junio de 2006 los distintos órganos judiciales condenaron a 29.356 varones, 7 de cada 10 juzgados.

A la vista de estos datos y de otros muchos que aporta el autor resulta evidente que la Ley contra la Violencia de Género es ineficaz pese a que, como muestra Díaz Herrera, cuando una mujer llama a la policía diciendo que su pareja le agrede, se presentan los agentes en menos de una hora y se llevan, esposado, al supuesto agresor. Una vez en las dependencias policiales se le toman las huellas dactilares, queda incluido en una base de datos como maltratador y lo meten en un calabozo. Al día siguiente es juzgado en un cuarto de hora con un alto riesgo de perder hijos, casa y quedar obligado a pasarle a su pareja una pensión compensatoria. Pasados 15 días se revisa la sentencia en el juzgado penal.

Ley ineficaz, sí, pero Díaz Herrera va más allá y plantea si ésta es una ley justa. En su opinión injusta porque priva al hombre de la presunción de inocencia. Injusta porque la Ley contra la Violencia de Género remite al Código Penal conflictos de pareja que podrían mitigarse o resolverse con una ley de mediación familiar que proporcionase apoyo psicológico o psiquiátrico gratuito y de calidad. Construido este volumen sobre un mosaico de casos que acaban por ser repetitivos, el texto pierde tracción por un exceso de metraje y la deriva de consideraciones demasiado permeadas de filias y fobias.

Bernabé SARABIA